La primera vez que tengas este libro en tus manos veras un titulo enigmático que probablemente no sepas que significa, veras una llamativa y sugerente ilustración, leerás el nombre de John Keel todo un seguro ya que es uno de los mejores escritores del siglo XX injustamente olvidado por algunos y por último veras el logo de Reediciones Anómalas un sinónimo de calidad y confianza.
Nos encontramos ante un billete en forma de libro para viajar por Asia y algunos países Árabes en busca de las supersticiones, los misterios y ese Jadoo esa magia tan especial de aquellas zonas del globo.
En esta obra nos encontramos con un Keel previo a su genial búsqueda y seguimiento del Mothman y anterior también a su plena pasión por la ufología, y eso nos lleva por tanto ante esta obra donde podrás acompañar a Keel a un pequeño poblado cerca de las maravillosas pirámides de Giza conocido como el nido de las víboras, lugar en el que los habitantes ya sean mayores o pequeños se ganaban la vida cazando víboras con las manos en pleno desierto con John Keel y la esfinge como testigos de sus aventuras. Y no lejos de ese lugar asistir a una misteriosa reunión de hombres barbudos a la luz de unas hogueras en las que se llevan a cabo extraños rituales con serpientes. O también recorrerás calles y callejones de El Cairo hasta dar por ejemplo con una misteriosa tienda escondida en uno de esos callejones donde vendían souvenirs supuestamente originales a los incautos turistas, una tienda además que esconde varios secretos: como las momias a la venta en la trastienda o un misterio aún mayor en el sótano.
Pero ojo que no todo es crónica de misterio también hay lugar a ciertas pinceladas autobiográficas donde conoceremos al Keel niño y su complicada infancia con sus padres separándose y él teniendo que irse a vivir con sus abuelos, y una vez que en esa nueva situación tenga más o menos asentada su vida su madre se volverá a casar y le obligará a irse a vivir con ella y su nuevo marido a una granja perdida en mitad de la nada donde los únicos refugios de Keel serán su perro, sus libros y su imaginación. O también las andanzas del joven Keel cuando es llamado a filas por la guerra de Corea, aunque su papel éste lejos de la acción y más cerca de escritorios buscando entretener a las tropas, incluida una genialidad al nivel del gran Orson Welles.
Resulta que Keel estaba harto de Stuttgart, del frío y la lluvia de aquel lugar y aunque allí conozca a Ingrid quiere huir de esa triste y desolada ciudad e ir en busca de aventuras y de su sueño de ser escritor.
¿Que dices? ¿Que quieres más aventuras? Sin problema puedes también acompañarle en un horrible viaje en coche hasta Bagdad donde Keel deja claro que los abusos en los peajes y en el precio de la gasolina no son nada nuevo. Y al poco de llegar a Bagdad tendrá la oportunidad de entrar en un poblado de adoradores de Satán.
Y de Bagdad a Bombay esta vez viajando en un peligroso barco. Siguiendo las huellas de misterios como la visión de rayos x, la visión remota, los encantadores de serpientes, los faquires enterrados vivos, los alfileteros humanos, los lectores de mentes o el truco indio de la cuerda.
Y si el primero fue un viaje en coche y el segundo en barco ahora toca un viaje en tren con destino al Himalaya en busca entre otras cosas del abominable hombre de las nieves. Y como última estación en su largo viaje un breve paso infernal por Singapur.
Keel hizo una maravillosa labor como cronista de un mundo que en gran medida ya no existe porque esta muy cambiado por diferentes motivos.
Como bien dice Pepe Aracil en su prólogo están los aventureros reales con sus botas y sus cuerdas y luego estamos los aventureros de salón y chimenea y esta obra para estos últimos es un auténtico deleite.
Un libro que se sale un poco del estilo o línea habitual de Reediciones Anómalas pero eso es porque es una auténtica joya que ningún fan del misterio debería perderse.
NOTA: 4/5
FICHA TÉCNICA:
Editorial: Reediciones Anómalas
Páginas: 348
ISBN: 978-84-09-24779-0
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